PRISIÓN PERPETUA PARA DOS GENOCIDAS EN SAN NICOLAS

 
 
En la ciudad de Rosario finalizó el Primer Juicio por delitos de Lesa Humanidad cometidos en la ciudad de San Nicolás. El Suteba se presentó como Querellante en esta causa, y aunque el Juez Federal Villafuerte Ruzo rechazó el pedido, nuestro sindicato siempre estuvo acompañando solidariamente la lucha de los familiares, amigos y compañeros de los asesinados. Hoy, tenemos el orgullo de haber acompañado a los familiares y amigos de las víctimas, en la sentencia a los genocidas. 
 
El ex coronel Manuel Fernando Saint Amant y los ex policías Antonio Federico Bossie y Jorge Muñoz, fueron sentenciados a prisión perpetua como autores de, entre otros, los delitos de homicidio, sustracción de un menor y robo agravado, en el marco del genocidio que vivió nuestro país. Los jueces dispusieron que los condenados cumplan la pena impuesta en dependencias del Servicio Penitenciario Federal.

Manuel Gonçalves Granada, único sobreviviente de la Masacre de Juan B. Justo, había declarado al inicio del juicio: “en principio, por haber participado de otros procesos incluso en el que tuvo que ver con el juicio en que se trataba la desaparición y asesinato de mi papá, entiendo que la justicia está en un lugar mucho más asentado con la temática de los delitos de lesa humanidad y cómo llevar adelante estos juicios. Mi gran expectativa es que este juicio termine con condena para todos los imputados y que, además, después se prolongue a quienes todavía no han sido imputados sobre estas causas”, y sostuvo la esperanza de que este primer juicio por delitos de lesa humanidad cometidos en San Nicolás sea el puntapié para la investigación de “muchos otros crímenes que se cometieron en San Nicolás”.

Finalizamos el año con más Memoria, más Verdad y más Justicia, con asesinos en prisión y con más luz sobre lo que pasó en nuestro país. Y esperamos, como deseo para el año próximo, que los delitos que faltan ser juzgados, sean llevados a juicio oral rápidamente, para que todos tengan la justicia que merecen.