EL SECRETARIO DE DERECHOS HUMANOS VISITÓ LA CTA

“Las centrales sindicales son clave en el debate democrático”




“Para empezar a hablar cuáles son los conflictos que hoy tiene la democracia, las organizaciones de trabajadores son clave en esa debate”, sostuvo el secretario de Derechos Humanos de la Nación, Martín Fresneda, antes de ingresar al encuentro que mantuvo con la conducción de la Central de Trabajadores de la Argentina.


Martín Fresneda visitó la sede nacional de la CTA, ubicada en San Telmo, en la tarde del jueves 7. Fue recibido por el secretario general, Hugo Yasky; el secretario de Derechos Humanos, Pablo Reyner; la de Género, Estela Díaz, el de Organización, Gustavo Rollandi, y el de Relaciones Internacionales, Victorio Paulón, entre otros dirigentes de la central.

Sobre lo charlado en la reunión con Fresneda, Yasky afirmó ante los medios que “a la Central le interesan temas como la evolución de los juicios a los responsables civiles del genocidio en la Argentina”. Una referencia al procesamiento del empresario azucarero Carlos Pedro Blaquier, por su complicidad con los crímenes de la última dictadura cívico militar. “Hemos hecho un seguimiento particular del juicio a Blaquier, y también nos interesa hablar sobre algunas situaciones puntuales, de denuncias en las provincias de nuestro país”, reveló el titular de la CTA", explicó Yasky.

Respecto al próximo 24 de marzo, día en que se cumplirá el aniversario número 37 del golpe militar, Yasky opinó que “en esa fecha nuestro pueblo le dirá masivamente no a lo que significó la dictadura cívico-militar en Argentina. Y es importante rescatar la idea de que a los derechos humanos hay que vincularlos al presente y no, como algunos pretenden, ponerlo como parte de una pieza del pasado, en un museo”.

Sobre el significado de los derechos humanos, Fresneda sostuvo que “deben ser políticas de Estado que se expandan hacia toda la institucionalidad argentina. Por lo tanto, parte de los objetivos es que también que podamos discutir esta agenda y podamos implementarla dentro de los ámbitos gremiales y políticos”.

El secretario de Derechos Humanos agregó que la discusión de una agenda “también tiene que ver con una construcción simbólica, con un sentido de las políticas de memoria, porque recordemos que el sector de los trabajadores ha sido una de las mayores víctimas del terrorismo de Estado, y muchas veces son víctimas en el ejercicio legítimo de sus reclamos”. Concluyó que “es muy importante que desde la Secretaría podamos trabajar con todos los dirigentes políticos y gremiales estos temas”.

Un día después de que el secretario de Hacienda de la dictadura, Juan Alemann, declarara como imputado en el juicio oral por delitos de lesa humanidad en la ESMA, Fresneda afirmó en la CTA: “Este país ha logrado, a diferencia de muchos otros países que han tenido grandes tragedias como el terrorismo de Estado, construir un puente hacia la democracia, con memoria, verdad y justicia”.

Reyner: "Celebramos esta visita"

Por su parte, el secretario de Derechos Humanos, Pablo Reyner, señaló luego del encuentro: "Esta es la primera vez que un Secretario del Gobierno de Derechos Humanos viene a la CTA y celebramos esta visita. Le tomamos la palabra a Fresneda de seguir los juicios por la verdad, como también dos procesos muy importantes como son el de Julio López y el de Mariano Ferreyra. También charlamos acerca de la posibilidad de abrir nuevas instancias de diálogo de la reconstrucción de la historia de la desaparición de miles de delegados de base, que fueron secuestrados en la dictadura. El balance es positivo y, desde la Secretaría de Derechos Humanos de la CTA, esperamos seguir por el mismo rumbo de la memoria, la verdad y la justicia".

Finalmente, los dirigentes de la CTA invitaron a Fresneda a participar de los actos que se realizarán el próximo 20 de marzo, en recordación de la represión ocurrida en 1975 en la pequeña Villa Constitución, Santa Fe, una ciudad que era sinónimo de metalurgia y de una clase obrera combativa. Aquel 20 de marzo del ’75 Villa Constitución se despertó invadida por miles de efectivos de las fuerzas represivas, con una lista de los domicilios provista por la empresa Acindar.