Carta a la comunidad educativa

A LA ESCUELA PÚBLICA LA DEFENDEMOS  ENTRE TODXS     

                           

                                      A quienes trabajamos cada día por el presente y el futuro de los hijos e hijas de todos y todas,

Familias de la escuela,

Compañeras y compañeros docentes,

Estudiantes:


Hoy nos reencontramos en nuestro lugar común, en este territorio que queremos y cuidamos porque es el único espacio en el que lo construido colectivamente, no nos lo quita nadie.

Nuestra escuela pública enseña, conocimientos para la vida, nos escucha, nos valora, nos identifica, nos reconoce, nos nombra, nos vincula, nos alimenta, nos organiza.


Nuestra escuela pública resiste, porque como no es negocio rentable para quienes buscan ganancias a corto plazo, se la ataca permanentemente, se la destrata, se la abandona.


Nuestra escuela pública sueña, con un futuro en el que las aulas confortables, el material didáctico necesario, los recursos humanos necesarios, las condiciones dignas para enseñar y aprender no sean la meta a conquistar, sino el punto de partida en la maravillosa aventura de construir y compartir conocimientos, que las Sandras y los Rubenes sean  recordados en los libros de historia cómo los Trabajadores y trabajadoras que dieron la vida sosteniendo la escuela en una época en que no contábamos más que con el amor y el compromiso de compañeros y compañeras como ellos.


Por ellos, por ustedes y por nosotros, estamos hoy acá.


Para decirles que vamos a estar siempre. En las aulas, en las calles y en la esperanza que brilla en la mirada de cada uno de nuestros estudiantes.


Porque la escuela pública enseña, resiste y sueña.